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Después de mi operación de cáncer de pecho trabajé diariamente con algunas secuencias del trabajo miofascial de Low Pressure Fitness y mejoré

Mi nombre es Ariadna Clols. Tengo 45 años. Hace más de 10 años que me formé como profesional de pilates y Low Pressure Fitness. Mi afición principal, desde hace 25 años, es la escalada deportiva y la bicicleta de montaña.

Hace dos me diagnosticaron un carcinoma ductal in situ fase 1 (tipo hormonal) en el pecho derecho. El pronóstico inicial fue someterme a una mastectomía radical (extirpación de todo el pecho), a lo que me opuse firmemente ya que me parecía surrealista estar en el siglo XXI, cuando se hacen operaciones de todo tipo a corazón abierto, a una mujer con un carcinoma de 1,6 cm se le tenga que extirpar todo.

Conseguí cambiar de hospital para poder tener otro pronóstico más conservacionista y lo logré. Me extirparon el carcinoma y 3 ganglios linfáticos.
Pregunté en seguida cuando podía hacer vida normal, y me dijeron que era bueno hacer una rehabilitación activa, es decir, no quedarse con el brazo en el canastillo como si tuvieras pánico a moverlo.

Ese mes estaba realizando obras en mi piso con lo que me puse a trabajar en él de nuevo y me pasé! El mismo estrés que se genera a nivel emocional al pasar por tal intervención hizo que levantara cosas de mucho peso a la semana de la operación. Se me hincharon los canales linfáticos. Empecé a notar que menguaba la movilidad en mi brazo derecho y que me dolía bastante al intentar levantarlo o extenderlo.

Busqué información al respecto y encontré que podía ser inflamación canales linfáticos, que aparecen como cuerdas de guitarra desde el punto de la cicatriz de la axila hasta el antebrazo. La fisioterapeuta del hospital de mi pueblo no sabía que tenía ni cómo tratarlo. Así que me asignó sesiones de drenaje linfático que fui combinando con estiramientos recomendados por la fisioterapeuta.

Pero como profesional en el mundo del entrenamiento y formada en biomecánica, me di cuenta de que también podía aplicar ejercicios de Low Pressure Fitness a mi rutina para potenciar mi recuperación. Empecé a experimentar con mi cuerpo aplicando todos los conocimientos acumulados durante años, y fui recuperándome favorablemente hasta poder volver a escalar y levantar la totalidad del mi brazo, con o sin peso. Trabajé diariamente con algunas secuencias del trabajo miofascial de Low Pressure Fitness que aplico en mis clases y mejoré.

Por lo tanto animo a las mujeres a trabajar estos estiramientos miofasciales con un buen profesional experimentado en Low Pressure Fitness para poder lograr mayor calidad de vida después de haberse sometido a una operación de cáncer de pecho.

Otro detalle, es que he empezado a aplicar estos trabajos en algunas de mis alumnas operadas de carcinoma (también sometidas a radioterapia) y los resultados están siendo muy satisfactorios.

Ariadna Clols
Trainer LPF

 

 

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