Cuando recibí este testimonio me emocioné muchísimo, creo que hasta entonces no había tomado conciencia real de cuanto había influido mi accionar en la vida de Marina.
Es un honor tenerla como alumna y colega, ya que has decidido incluir esta técnica en tu vida personal y profesional.
Gracias por su apoyo, su constancia y generosidad.
Celeste Concolino
Profesional LPF
«Mi cuerpo, hermano, mi cuerpo es mi propia escenografía» (1)
¿Qué quieres que te cuente? Yo te puedo contar la historia con mi cuerpo, hermano, con mi cuerpo, con mis gestos, mis ritmos, mis dolores…. La historia también te la cuento con las manos y los ojos, sin hablar. Y con mis pausas. Y es mi cuerpo atravesado el que se puebla de sensibilidad que me nombra, la historia de los decires balbuceantes, con las dicciones de los grandes tormentos y tartamudeces de la noche. Yo quisiera contarte de mi desesperación, de mi impotencia, del sopor del insomnio, de la angustia.
Como puedo resumir «Lo que puede un cuerpo» Con la ayuda adecuada.
Me presento desde un cuerpo afectado, una persona con una discapacidad no visible, que supo establecer una obligada y forzosa amistad con el dolor. Padezco fibromialgia postraumática desde hace nueve años debido a un accidente. Tengo dos discos rotos en la columna dorsal y las consecuencias muy poco simpáticas de la fibromialgia. Mi evolución ha sido variada, con muchos brotes de dolor y espasmos cotidianos. He probado varias técnicas de rehabilitación que me ayudaron y otras no. Pero ninguna tan efectiva como RPG y es en Low pressure fitness en donde reconozco muchas posturas.
Mi cuerpo estaba acostumbrado a otros modos de respirar y ser guiado. En un principio no me resultó fácil sobre todo por las rigideces, espasmos musculares y las posturas compensatorias que acompañan el dolor crónico.
El cuerpo nos habla de sus males y nos invita a conversar. Es triste cuando sólo puede trasmitir dolor
No puedo separar la técnica hipopresiva de la persona, su competencia y los fenómenos grupales. Un grupo con un clima cálido, positivo, resiliente, donde circula el humor. Una docente entrenada, apasionada, atenta a las necesidades individuales. Siempre me llamó la atención el conocimiento sumado a la pasión.
El estar atento escuchante.
Y así mi cuerpo se sintió escuchado. Y empezó a contar sus luchas internas, sus tensiones, sus bloqueos, su emocionalidad, su frustración: Limitaciones. En fin su historia reciente ¡Con la ayuda de ésta técnica y de Celeste empecé a descubrir que podía! Que los ejercicios me iban llevando en una progresiva relajación al tono muscular, a la expansión y a sensibilidad de los lugares corporales dormidos.
Desde el punto de vista neurológico los temblores dejaron de aparecer notablemente, las parestesias hoy son poco frecuentes y finalmente el dolor disminuyó. Mi medicación se redujo tres veces durante este año. Puedo asegurar como testigo válido que la técnica ha funcionado para mí. Es por eso que invito a otras personas con dolor crónico a que la prueben con profesionales formados e idóneos, insisto en esto.
Mi postura cambio radicalmente y puedo verlo en mis compañeras de grupo. La capacidad respiratoria. Oxigenación. Relajación. Tono. En fin: disminución del dolor. Frente a la escenografia de un cuerpo roto. Me encuentro con un cuerpo capaz de hacer. CUERPO POSIBLE. Hasta entonces impensado. Un cuerpo con ganas de trabajar y trabajarse que puede volver a sostenerse otra vez.
Agradezco la posibilidad de atravesar estos espacios de aprendizajes que generan autonomía. Que frente al dolor crónico, tengo otras herramientas para estar mejor. Mi entorno más cercano nota muchos cambios. Me encuentro más activa en un mundo menos doloroso, más feliz.
A Celeste, a mis compañeras de clase con quienes disfrutamos este espacio de crecimiento mutuo: GRACIAS INFINITAS
«Nadie sabe lo que puede un cuerpo» (Espinoza).
Marina Isla
Alumna